Francie Campbell Sills, arquitecta formada en la Universidad de Chile, ha dedicado más de 20 años a la creación de espacios únicos tanto en Chile como en Estados Unidos. Actualmente, lidera su estudio homónimo, donde ofrece un servicio integral que abarca desde la arquitectura hasta el interiorismo.
Desde su infancia, Francie ha tenido una conexión especial con el arte y la arquitectura, desarrollando una aguda capacidad de observación que la llevó a descubrir su vocación.
“Mi amor por la arquitectura y el diseño nacieron junto conmigo. Desde chica he desarrollado una capacidad de observación que sólo los artistas tienen. En mi caso me asombraba con la altura de los espacios, o con detalles como las vetas de la madera en los cielos de mi casa donde jugaba a descubrir nuevas formas», recuerda la arquitecta.
Su carrera comenzó en 2001, en una oficina de arquitectura en Nueva York, Estados Unidos, donde trabajó en el diseño de aeropuertos, a partir de ahí ha evolucionado a través de diversas experiencias en reconocidas oficinas e inmobiliarias, donde encontró su pasión por los detalles y el interiorismo.
En 2016, fundó su estudio, que describe como un «taller de sastrería» donde cada proyecto es a medida y busca transmitir una energía única.

«Busco que mis propuestas sean genuinas, que tengan “alma” y hablen por sí solas. Mis obras son provocativas. Transmiten una energía especial. ¿Cómo lo consigo? Entendiendo el encargo a cabalidad a través del conocimiento del usuario y tomando las restricciones constructivas como herramientas de diseño», comenta.
Francie se especializa en transformaciones de espacios, desde obras nuevas hasta remodelaciones y obras menores.
«Ofrezco una asesoría integral de diseño que va desde la arquitectura al interiorismo. Estoy dedicada a la arquitectura residencial. Desde obras nuevas a remodelaciones e intervenciones menores como cocinas, baños, quinchos, home office y muebles a medida. Me encantan las transformaciones, volver a llenar de vida espacios deteriorados me parece un proceso tremendamente bello. Los detalles para mí son fundamentales, son responsables de la experiencia de quien habita los espacios. La elección de materialidades, el aprovechamiento de la luz natural, el rescate de elementos preexistentes para realzar el valor de la obra, el equilibrio en los recursos, el factor “wow”, son algunos de los elementos que siempre estarán entre mis prioridades», apunta con entusiasmo.
«Abordo mis proyectos desde una perspectiva integral. Lo que busco es la coherencia entre el encargo, lo que busca el cliente y mi propuesta. Para mí la CONSISTENCIA es determinante. Una obra debe hablar por sí sola», explica Francie que actualmente está enfocada en varios proyectos para el 2025 que la tienen muy entusiasmada e ilusionada.
A continuación, se presentan algunos de sus proyectos de 2024, que no sólo muestran la variedad de espacios y estilos a los que suele enfrentarse sino que al mismo tiempo reflejan su compromiso con la creación de recintos que realmente hablen por sí mismos.






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